Florentino Gonzáles: el segundo mejor jurisconsulto de América

FLORENTINO GONZÁLES: EL SEGUNDO MEJOR JURISCONSULTO DE AMERICA.

Por María de los Ángeles Oliveros Maestre.

INTRODUCCIÓN En el siguiente trabajo tratare de analizar desde una perspectiva política una de las mas grande vida y obra del segundo mas importante jurisconsulto de America doctor José Nazario Florentino González Vargas, la cual me llama muchísimo la atención como este gran hombre alcanzo la mayoría de sus metas, y lo que con poquito a poquito nos mostró como siempre luchar por una ley, aunque con tropiezos se levanto y siguió con al frente en alto. Florentino González creció en el gimnasio moderno de el que saco lo poco que en el se haya. Allí José María y tomas Samper, Pablo Vila, Agustín Nieto Caballero y Tomas Rueda Vargas, lo que acudieron en muchas oportunidades en sus criterios y con su espíritu. Después de Andrés Bello, Florentino González es quizá el jurisconsulto americano cuyas creaciones ejercieron mayor influjo; clásico genuino de la concepción y del lenguaje, cuya estrella que alumbro tantas obras. Florentino González se caracterizo como funcionario del estado por una iniciativa creadora. Por el arrojo para las determinaciones, que frenaban y ponderaban su capacidad de racionamiento, explicarse así que fue ministro de hacienda en el periodo presidencial de Mosquera. En su rol de parlamentario conquisto gran celebridad, por que lo colmaba con la figura jurídica de su razonamiento elegantísimo, inexpugnable y diáfano. Ser orador es cosa muy distinta de tener facilidad y abundancia de palabras. Discurso quiere decir en español razonamiento; y solo razona el que tiene materiales de meditación ordenada o para abreviar, el que recibió disciplina clásica. Florentino González alcanzo el titulo de doctor y poco después la cátedra. Hablar de Florentino González es hablar de los orígenes del pensamiento liberal en Colombia y del inicio del doloroso proceso de transición desde las estructuras coloniales a las moderna. Inspirador de las reformas del radicalismo gólgota (apertura comercial, descentralización político-administrativa, ruptura de los privilegios fiscales coloniales, etcétera), En 1859 la cámara de representantes quiere forzarlo como procurador de la nación que era a porfía vicepresidente de la republica, a que demande ante el senado un contrato de arrendamiento de la salina de Zanjón, celebrado entre el gobierno y don Carlos Michelsen, en el 53. Florentino rotundamente se negó a obedecer el mandato, y fue entonces acusado ante el senado de Colombia, y fue cuando acepto el cargo de plenipotenciario en el gobierno del Perú, para mediar las diferencias con el Ecuador, y para someter a juicio arbitral del gobierno de Chile, donde ejerció funciones diplomáticas hasta 1861, en lo sucesivo segura como siempre abogado. Este es una breve relato de lo que encontraremos consignado en este trabajo lo cual nos mostraba la honorable vida de uno de los mas grande jurisconsulto De la época. ¿PREGUNTA PROBLEMA? ¿Cuales fueron los motivos que inspiraron a Florentino González para proponer un proyecto de ley para fundar el banco nacional de nueva granada? Florentino González, Secretario de Hacienda del primer Gobierno del Presidente Tomás Cipriano de Mosquera, fue el primero en someter a consideración del Congreso de la República, un proyecto de ley para la creación de un banco nacional de nueva granada. González consideraba necesaria la fundación de un establecimiento, "sin el cual las operaciones de la industria y del comercio carecerían del auxiliar más poderoso para ser eficaces y productivas: este establecimiento es un Banco nacional" Consideraba que el crédito era un capital que debería ponerse en movimiento para auxiliar la producción y el comercio: "Los bancos son los que convierten el crédito en un capital tangible, y facilitan su empleo. Es pues, preciso que, si los legisladores adoptan las demás medidas, den también su aprobación al proyecto que autoriza el establecimiento de un Banco Nacional, para que aquéllas tengan influencia eficaz en el desarrollo de los recursos de nuestra patria, y en darle vida y animación. PROPÓSITO DEL LIBRO. (Memorias Florentino González). Este libro tiene como propicio mostrarnos la vida de un gran jurisconsulto, lo cual con un carácter fuerte pero muy inteligente que radiaba una gran vibra que se notaba en casa sitio donde el llegaba. Este libro nos muestra su vida su obra y deja conocer a la calidad de ser del gran Florentino González., se desarrolla baja las perspectivas políticas que manejo durante toda su vida.

FLORENTINO GONZÁLES: ElSEGUNDO MEJOR JURISCONSULTO DE AMERICA. Florentino González. Político, periodista, hombre público y catedrático santandereano (Cincelada, 1805 - Buenos Aires, Argentina, enero 2 de 1874). Doctor José Nazario Florentino González Vargas, quien fue consagrado en 1825, en San Bartolomé, como bachiller, licenciado y doctor en Jurisprudencia siempre se le llamó don Florentino González; así se le recuerda en la historia, Al graduarse inició su carrera política, en un principio, tímidamente, como escribano de la Cámara de Representantes (1825) y, más adelante, ocupando cargos importantes como gobernador encargado de Cundinamarca (1836), diputado de la Cámara de Representantes (1833), Secretario de Hacienda durante la administración de Mosquera (1846) y Procurador General de la Nación (1858), Entre 1833 y 1839 González se desempeñó como profesor titular de derecho constitucional, ciencia administrativa y derecho internacional en la Universidad de Bogotá, a la cual quedó incluido el Colegio del Rosario en 1826. González perteneció a lo que se denomina la "segunda generación de libertadores", Fue uno de los principales artífices de las reformas políticas liberales, que es como se singulariza a quienes integraron el radicalismo liberal. Este fue, desde luego, de capital importancia para desamarrar a la república de todos los resabios coloniales, logró el rompimiento de las instituciones heredadas de España, y se mantuvo a la vanguardia de los principios federalistas. Caracterizada por el afán de profundizar, hasta el exceso, en el examen de los problemas primordiales del país, esta generación obró con rigor moral, que fue otro de sus signos: el patrimonio público no podía confundirse con la avidez de los timadores que se asomaban a la vida política. Su noble impulso fue la defensa de la totalidad de las libertades; en sus gobiernos, ninguna sufrió necesidad, cortapisa o dejó de aplicarse. Tenía, igualmente, marcada su señal antifeudalista, en un medio donde el feudalismo predominaba. Cuando cayó el radicalismo, se atajó y desvió el ímpetu transformador; una revolución se inmovilizaba por el imperio de la fuerza de la Regeneración conservadora de Rafael Núñez y Miguel Antonio Caro. Florentino Tenía solo 5 años cuando en el 1810 las provincias que componían el virreinato de la nueva granada alcanzo el grito de independencia de la monarquía española. Su padre joven de 27 años, un patriota activo y emprendedor, abrazo la causa de la emancipación, en 1913 o 1913 Antonio Baraya y José miguel Pey, se dirigían a combatir a favor de la independencia, el 1819 el 10 de agosto en las horas de la tarde, en bogota en la plaza de san diego, fue cuando por primera ves vio al libertador bolívar, recordando ese día como uno de los mas felices de su vida. Recuerda que se organizo la administración militar y de hacienda, y se aseguraron los caudales, armas, municiones y demás pertenecientes al Servilio público, que habían quedo en las manos de gobierno. El gobiernos e organizo de esta manera. El territorio que debía formarse después de la republica de Colombia, debía tener por jefe supremo al general bolívar, las providencias se organizaban por lo pronto el departamento de Cundinamarca, de cuyo gobierno civil y militar se encargo al general francisco de Paula Santander con el titulo de vicepresidente. En enero de 1823 se reunió en bogota el primer congreso constitucional de Colombia, florentino ávido de conocer el gobierno representativo, jamas flat a las sesiones de la cámara, especialmente la de representantes, donde comenzó a observar a los distintos parlamentario. Entre los negocios que el senado debía ocuparse era uno de los el juicio del general Antonio Nariño, cuya acusación había decretado el congreso constituyente de 1821, para que respondiese de su manejo como colector de diezmos que había sido antes de la emancipación de la republica. Este general, nombrado senador, había venido a bogota en el año anterior y con su presentaría resucito el antiguo partido cuya cabeza había el estado en la época del gobierno federal. En 1824 no hubo tantas dificultades para la reunión de las cámaras y asistió a las sesiones un número mayor de diputados. Donde florentino asistió de escribiente en la secretaria de la cámara de representantes, donde el salario era de solo 20 peses mensuales pero se aumento enseguida a 25 pesos. , Actuó como redactor del Constitucional de Cundinamarca, en asocio de los doctores Rufino Cuervo, Ignacio Gutiérrez Vergara, Lo¬renzo María Lleras y otros más. En 1833 acudió como re¬presentante al congreso, por Ja provincia del Socorro, Entre los numerosos periódicos aparecidos en el curso de este año y como el más importante, se cuenta El Cachaco, que fundó en unión de Lorenzo María Lleras Tuvo como colaborador e inspirador al presidente Santander. En 1825 empezaron a llegar a bogota algunos fondos de los que habían prestado los ingleses, y con la presencia de este numero se animaron muchos negocios mercantiles, y se colmo el descontento que empezaba a nacer en los empleados tantos civiles como militares, por lo mal pagado que se hallaban. Parte de este anticipo había ido al Perú por Panamá, parte de lo que se había invertido en armamentos y buques de guerra. En año 1826, el genial José Antonio Páez fue denunciado ante la cámara de representares como infractor de la constitución, por varias tropelías que en su orden se hicieron en caracas, al tiempo de hacer al alistamiento de los ciudadanos en la milicia nacional. Examinándose los hechos, los diputados de Venezuela sostuvieron la casación, se decreto esta ante la cámara de senado, pensando algunos que el imperio de la ley era ya fuerte en Colombia para doblegar ante ella cualquier celebre caudillo y los que no creían quería darse cuanta si esta he lo saltara de la duda, donde la cámara del senado acepto las acusaciones, suspensión del general Páez de sus funciones. Florentino tubo un gran aporte importantísimo en el neoliberalismo y el intervencionismo en America, En 1840, González consideraba como una de las piedras angulares de su propuesta el libre cambio y libertad absoluta del comercio en los ámbitos interno y externo, la cual iba acompañada de otras libertades como la de industria, abolición de monopolios estatales y privados, garantías a la propiedad privada y participación de los particulares en los asuntos públicos a través de la contratación de obras y las restricciones al Estado en la realización de actividades que los particulares pudieran hacer mejor estimulados por el interés de las ganancias. Por ese entonces en vida de González, se desarrollaban en Colombia enconadas luchas por parte de los artesanos organizados en las en asociaciones fraternales inspiradas en los principios promulgados por los socialistas utópicos franceses entre las que se pueden mencionar: La Sociedad Democrática de Artesanos, y otras asociaciones de orientación conservadora como la Sociedad Popular la Sociedad Filotémica. sus ideas se impusieron sobre otras opiniones divergentes como la de Castillo y Rada quien señalaba que “el objeto de la legislatura debe ser el aumento de los productos con ventajas en la riqueza nacional”. Ni tampoco las explicaciones de José Ignacio de Márquez quien en sus memorias de hacienda afirmaba que: “La crisis de la industria que no ha podido resistir la competencia extranjera se ha debido a la excesiva libertad de comercio exterior que ha hecho bajar el precio de los géneros Así como nuestros productos no tienen expendio, y los pueblos se han visto en la dura necesidad de abandonar sus fábricas, de donde ha resultado igualmente la baratía o más bien el casi ningún consumo de las materias primas con perjuicio de la agricultura y de la cría de ganado lanar. Si hay alguno que dude de esta verdad no tiene más que recorrer las industriosas provincias del Socorro, Tunja, Bogotá, Pamplona, antes bastante productoras y hoy abandonados y pobres. Si se quiere, pues, vivificar el comercio, y beneficiar a los colombianos, es preciso que se pongan trabas al comercio extranjero, prohibiendo absolutamente la introducción de varios géneros, frutos y efectos que se producen en nuestro país.” Entre los años de 1834 a 1836 y aunque en forma interi¬na desempeñó las secretarías de hacienda, de lo interior y de relaciones exteriores, y con igual carácter, la gobernación de la provincia de Bogotá. El 22 de octubre de 1837, el general Santander dio a la publicidad el semanario La Bande¬ra Nacional, “muy bien escrito y con artículos de fondo de bastante mérito”, como lo anota un distinguido historiador. Los primeros números, además de Santander, fueron redac¬tados por Florentino González y Lorenzo María Lleras. En 1839 fue nuevamente representante al congreso nacional por la provincia del Socorro. A los pocos meses de clausurada La Bandera Nacional, apareció El Correo, que redactó en compañía de Vicente Azuero, Francisco Soto y otros perso¬najes santanderinitas. El 21 de diciembre de este mismo año fue designado como rector de la Universidad Central. Mas por el hecho de haber recaído el nombramiento en un miem¬bro del congreso, el gobierno alegó su ilegalidad y fue reem¬plazado por el doctor José Duque Gómez. Ante esta determi¬nación, Florentino González renunció la cátedra de derecho constitucional que regentaba en dicha universidad. Al siguien¬te año, tambi6n concurrió al congreso nacional por el So¬corro, su provincia nativa. En el mes de febrero de 1841 y a causa de la revolución viajó a Europa en donde permaneció hasta 1845. Tanto en Francia como en Inglaterra adelantó serios estudios en de¬recho público y ciencias económicas, principalmente. A su regreso, se dedicó a algunas actividades comerciales e igual¬mente colaboró en El Día, en cuyas columnas trató temas y problemas de carácter económico. El 14 de septiembre de 1846 y pese a su posición política. Florentino González, hombre talentoso como pocos y de una vasta preparación en cuestiones políticas, económicas, fisca¬les y de administración pública, fue designado por el presi¬dente Mosquera para ocupar la secretaría de hacienda, en la que desempeñó una labor de suma importancia y trascen¬dencia para el país. En el seno del congreso y como miembro del gabinete presentó diversos proyectos, empezando por uno que facilitaba la administración de hacienda y procuraba hacer más expeditas las liquidaciones de cuentas y más fácil el examen de los recursos fiscales. Una de la sobras mas importante como ministro de hacienda fue autorizar para fundar e banco nacional de nueva granada , fue el primero en someter a consideración del Congreso de la República, un proyecto de ley para la creación de un banco nacional. Al lado del paquete de medidas de carácter fiscal, sobre rentas de tabaco, tarifas aduaneras, comercio de tránsito, salinas, moneda, diezmos, crédito nacional y bienes de manos muertas, Florentino González consideraba necesaria la fundación de un establecimiento, "sin el cual las operaciones de la industria y del comercio carecerían del auxiliar más poderoso para ser eficaces y productivas: este establecimiento es un Banco nacional" Consideraba González que el crédito era un capital que debería ponerse en movimiento para auxiliar la producción y el comercio: "Los bancos son los que convierten el crédito en un capital tangible, y facilitan su empleo. Es pues, preciso que, si los legisladores adoptan las demás medidas que propongo, den también su aprobación al proyecto que autoriza el establecimiento de un Banco Nacional, para que aquéllas tengan influencia eficaz en el desarrollo de los recursos de nuestra patria, y en darle vida y animación. En 1847 fue candidato a la presidencia de la república y en el año anterior lo había sido para la vicepresidencia. El 28 de enero de 1849 el presidente Mosquera instaló el Instituto Caldas, con miras a “preservar la moral, fomentar la industria, la educación, la inmigración de extranjeros, la estadística y las vías de comunicación”. Florentino González formó parte de la sección de caminos, inmigración y esta¬dística. El 8 de junio de 1848 fundó el semanario El Siglo, desde donde expuso sus ideas políticas y tuvo como colabo¬radores a Julio Arboleda y Lino de Pombo. Al siguiente año, a principios de febrero, fue nombrado como encargado de negocios en Francia y la Gran Bretaña, legación que fue suspendida en el mes de octubre. Luego de haber figurado nuevamente como candidato a la vicepresidencia y de haber sido entusiasta partidario de la federación, en 1853 asistió al vigésimo primer congreso constitucional de la Nueva Gra¬nada, como senador. El 6 de febrero de 1854 fue elegido como procurador de la Nación, cargo que desempeñó con suma actividad y competencia hasta 1858. A comienzos de mayo de 1857 se le promovió una acusación ante el Senado de la República por no haber llevado a la Corte Suprema de Justicia el jui¬cio de nulidad de un contrato de arrendamiento de la sa¬lina del Zanjón, contigua a la de Zipaquirá. Sobre este acontecimiento, J. M. Cordovez Moure, en sus Recuerdos autobiográficos, relata lo siguiente: “Pocas veces se presentará en nuestros Congresos un es¬pectáculo tan instructivo como el que ofrecieron aquellos atletas parlamentarios en pleno vigor intelectual. A la formi¬dable acusación de Malo Blanco, circunscrita a los hechos expuestos en los autos, sin una sola frase que denotara pa¬sión en el debate, replicó Florentino González con la des¬deñosa altivez que lo distinguía; combatió uno a uno, con derroche de elocuencia, los cargos del fiscal, y terminó pa¬rodiando al defensor que, al ver perdida la causa de su clien¬te, la exhibió desnuda, exclamando en actitud amenazante: ¡Condenadme si os atrevéis, honorables senadores! En realidad de verdad la acusación a Florentino Gonzá¬lez fue un brote desgraciado de sus malquerientes, que le proporcionaron aquel triunfo en su carrera política, porque fue absuelto a contentamiento general”. En el mes de marzo de 1859, el absuelto procurador par¬tió para Lima y Santiago de Chile, con el carácter de en¬viado extraordinario y ministro plenipotenciario. A partir de 1861 fijó su residencia en Chile y aquí, al hacer dejación del cargo diplomático se dedicó con éxito sobresaliente a la labor periodística, publicitaria y docente. Fue redactor, entre otros periódicos, de El Tiempo y El Mercurio de Valparaíso. Con apoyo del gobierno publicó un Proyecto de Código de Enjuiciamiento, y poco más tarde, el Diccionario de Derecho Civil Chileno. F. González pertenecía conjuntamente con Mosquera y el expresidentes eran al grupo de librecambistas de la Nueva Granada más decidido de ese entonces: “Los más interesados en lograr prosperidad personal por sus fuertes capitales depositados en el exterior para el fomento del comercio de importaciones” Por ese entonces el partido liberal se dividió en dos fracciones igualmente interesadas en obtener ventajas económicas, denominado una “golgotas” que defendían el libre cambio y la otra “draconianos” favorables a la imposición de restricciones al comercio internacional, como la de prohibir o constituir altos aranceles a la importación libre de mercancías que se pudieran producir en el país. Discusiones en el mismo sentido entre partidarios de una u otra concepción de la política económica, se presentaron en otros países de América. Estas disputas en varias ocasiones trascendieron la simple retórica y dieron lugar a guerras intestinas en las que se enfrentaban defensores y opositores de ambos bandos. Las expresiones de los neoliberales en el norte datan de la segunda mitad del Siglo XIX A comienzos del Siglo XX, en EE.UU., en los primeros años de la década de 1920; el liberalismo influyó y atrajo a numerosos economistas adscritos al marginalismo que fueron descartando paulatinamente sus viejos dogmas y hoy cuenta con numerosos adeptos en el nuevo y viejo mundo. Personajes como Hayeck para quien las relaciones comerciales son las fundamentales de la sociedad, o Rawls quien sostiene la idea de que el mercado ejerce una acción decisiva en el desarrollo económico. Posteriormente pasó a Buenos Aires, en donde con su fama de gran humanista y esclarecido jurisconsulto, prosi¬guió su carrera intelectual, con particularidad en el ramo docente, y conquistando triunfos, desde luego. Baste decir que fue el fundador del derecho constitucional argentino. Fruto de la consagración catedrática son sus obras: Ciencia administrativa y Lecciones de Derecho Constitucional. Pero además publicó otros estudios de importancia, tales como el relacionado con el uti possidetis de 1810, y algunas traduc¬ciones del inglés y del francés, con anotaciones y comenta-rios. Florentino González murió en Buenos Aires, el día 2 de enero de 1874, y sus restos fueron repatriados en 1934. CONCLUSIÓN. De este trabajo puedo concluir que don Florentino González fue un gran jurisconsulto y defendió las ideas liberar en cada respiro de su vida, mostrándonos que todo lo que queremos lo conseguimos, nos dejo una enseñanza que muchos jurisprudente de Colombia deberían aplicar y era luchar siempre por su país para que no le faltara nada no solo por aquellos que tienen mas sino por todos las nacionales. Deja para la historia muchas obras de las cuales son gloriosas para America, todo el que estubo cerca de el y todos los que tenemos la dicha de saber de su vida y obra sabemos que fue un hombre de mucho carácter e inteligencia que pensaba cada uno de los pasos que dio en el trascurso de su vida. El docto José María Samper dijo las siguientes palabras refiriéndose a Florentino González. “Florentino González era alto de cuerpo, de gallardo porte, la talla esbelta, la cabeza erguida y poderosamente confor¬mada; el cabello y la barba negros y ligeramente rizados; la tez de un blanco mate casi pálido; los ojos grandes hermosos y expresivos, bien que medio velados por momentos y con cierto aire melancólico; la frente magnífica, abierta y como iluminada; la nariz firmemente perfilada y recta; el rostro anguloso y de líneas llenas de vigor; la boca grande pero fina, en la que vagaba siempre una sonrisa como de superioridad y desdén y una expresión de confianza en sí mismo; una voz de entonación suave pero llena y enérgica; el andar digno y libre, y en toda la figura un sello patente de inteligencia superior, de independencia y de resolución: tales eran los rasgos físicos de Florentino González, gallardo como un gladiador de buen tono, distinguido como un gentleman inglés, lleno de luz en la cabeza, de entereza en el corazón y de fuerte voluntad”. BIBLIOGRAFÍA. • DIAZ VIDELA, NESTOR. florentino González y los demonios del siglo xx. ciencia política. 1993, octubre-diciembre. • GONZALEZ, FLORENTINO. Las vacas de dios. Cuento. 1996. • PINSON, MARTIN ALFONSO. Florentino González, jurisprudente y hacendista. • GONZÁLEZ, FLORENTINO. El juicio por jurados: breve noticia. Buenos aires, argentina 1869. • BIBLIOGRAFÍA. florentino Gonzáles. Temis, 2008.