miércoles, febrero 28, 2007

Sucre: biografía de un sacrificio (Dietrich) Granados

SUCRE: BIOGRAFÍA DE UN SACRIFICIO.
Por Andrea Carolina Granados Rivera.
“Biografía es historia…”1
A través de éstas líneas pretendo exponer pasajes de la vida del gran héroe de Ayacucho: El General Antonio José de Sucre. Para ello resaltaré apartes importantes de su vida, su personalidad, la gran cantidad de valores y virtudes que tuvo éste gran personaje, resaltando ante todo su humanismo y su humildad (los cuales demostró en cada momento de su vida, incluyendo sus batallas),lo cual es parte esencial para que éste sea un personaje que la historia ha querido dar a conocer, no sólo por las causas en las que participó, sino también por los cambios que gracias a él tuvieron efecto y que incluso hasta el día de hoy han perdurado.
De la vida del General Antonio José de Sucre, poco es lo que la gente del común conoce, dado que se puede considerar como uno de los personajes secundarios, que dan vida al que por muchos es considerado el personaje principal de la historia, el héroe…El libertador: Simón Bolívar.
Sin embargo es de resaltar que la historia no hubiera sido la misma sin la presencia de éste personaje que le dio un aire de humanidad a todas las batallas que rodearon la época de la independencia.
Antonio José de Sucre fue una persona muy humana, con una vida intachable, de su vida sobresale la valentía, la limpieza de sus intensiones y sus acciones, sus sentimientos de humanidad y profundas intensiones de fraternización, su humildad, su dulzura, y muchas otras cualidades que a lo largo de éste escrito se harán presentes…
En la obra de Wolfram Dietrich (quien en ningún momento oculta la profunda admiración que siente por el general Sucre), podemos observar la gran cantidad de valores que poseían éste personaje, en donde aparte de los ya mencionados, se encontraban también su esencia eficaz, nobleza, firmeza, perseverancia en la defensa de su propia opinión basándose en el conocimiento de los motivos y los hechos, inteligencia y valor; sin olvidar la justicia, de la cual decía que era el sentido para la belleza de las cosas. Para él todo sacrificio por la humanidad y por la patria, era considerado como glorioso.
El general Antonio José de Sucre nació en la ciudad de Cumaná, en las provincias de Venezuela, el 3 de Febrero de 1795. Perdió a toda su familia cuando estaba muy pequeño, su padre Don Vicente fue arrastrado a las bóvedas de La Guaira como consecuencia de la capitulación de San Mateo, su madre Doña María Manuela falleció poco después de darle vida, su madrastra para sustraerse de las atrocidades de las hordas de Boves cuando ocuparon la ciudad, se arrojó por una ventana; su hermana enferma en aquel momento murió de espanto, dos de sus hermanos fueron fusilados como traidores a su Sacra Majestad en el campo de batalla, y un tercer hermano fue muerto en un hospital. Tras estos terribles acontecimientos y sin ninguna transición, el niño se había hecho hombre, antes de tener la edad de 17 años.
Sucre fue nombrado subteniente de milicias regladas de infantería en el año de 1810, en 1811 ejerció en Margarita el cargo de comandante de ingenieros, en 1812 fue comandante de la artillería en Barcelona, formó parte del grupo de republicanos conocidos como “los libertadores de oriente”, bajo el mando de el general Santiago Mariño en el año de 1813.
Participó en la toma a Barcelona el 19 de agosto, y ascendió rápidamente de Capitán a Mayor. Posteriormente tuvo que elegir entre Mariño y el libertador, ésta elección no fue difícil debido a que anteriormente había asistido a encuentros de los dos generales y en éstos pudo observar a Mariño como un ser egoísta, satisfecho de sí mismo e irrespetuoso, y a Simón Bolívar como “un ser ardiendo en domado fuego, deshecho de todas las escorias de una vanidad individual y únicamente preocupándose de la gran finalidad, puesto, en medio de la perfecta convicción de sus propios méritos, a inmolarse a la más mínima necesidad que pudiera derivar la idea de libertad.” 2 Razones por las cuales indudablemente optó por quedarse al lado del libertador. Tiempo después ascendió de teniente a coronel.
Participó en la Batalla de Carabobo del 28 de mayo de 1814, en la Batalla de Aragua en 1814, así como también participó en la Defensa de Maturín y en la Batalla de Carabobo del 24 de junio del año 1821.
Tras el escarnio y la expulsión de Mariño y Bolívar, Bermúdez y Sucre escaparon hacia Margarita, luego pasaron por las Antillas y desembarcaron a mediados de 1815 en Cartagena. Por su parte Bolívar se había ido a Jamaica, después de la infeliz campaña contra Santa Marta. Sucre en Cartagena logró que las condiciones de alimentación fueran iguales para los prisioneros y para los otros asediados.
En 1816 el General Sucre se encontraba en una situación de extrema pobreza, y sus únicas pertenencias eran los vestidos que llevaba encima, en éste año, Mariño se proclama Jefe Supremo y nombra a Sucre Jefe de Estado Mayor. A mediados del año 1817 el Héroe de Ayacucho se separa definitivamente de Mariño y se reúne de nuevo con Bolívar. En tres ocasiones Bolívar le dio ejércitos, demostrándole con ellos su confianza y nombrándolo Jefe de los mismos.
Otra de las cualidades que se resalta en Sucre es su compañerismo guerrero, el cual se observa fácilmente por las vicisitudes que enfrentó junto con Bermúdez, cuando más el uno urgió, tanto más el otro examinó, suprimió errores y cuidó el bienestar de los soldados, encauzó la manera de hacer la guerra en caminos ordenados, organizados y disciplinados como hasta el momento no existieron en ninguno de los cuerpos de los ejércitos patriotas .
Bolívar resalta en su obra “Resumen sucinto de la vida del General Sucre”: “Él era el alma del ejercito en que servía. Él metodizaba todo, él lo dirigía todo, más con esa modestia, con esa gracia con que hermosea cuando ejecuta. En medio de las combustiones que necesariamente nacen de la guerra de la revolución, el General Sucre se hallaba frecuentemente de medidor, de consejero, de guía, sin perder nunca de vista la buena causa y el buen camino. El era el azote del desorden y sin embargo el amigo de todos.”
En 1821 Bolívar le otorgó el cargo de ministro de guerra y marina ad- interin.
Por otro lado, Sucre escribió un acuerdo para la humanización de la guerra entre España y Colombia, el cual constó de 14 artículos, entre ellos sobresalen el artículo dos, referente al derecho a la vida de los prisioneros de guerra hasta lograr el canje; el artículo cuatro, el que se consigna que los heridos o enfermos no serán tomados como prisioneros de guerra y tendrán libertad para restituirse a las banderas a que pertenezcan; el artículo 8, en el cual se declara que el canje de prisioneros de guerra es obligatorio y se debe realizar a la más posible brevedad y el articulo 12, en el cual se establece la obligación de sepultar aquellas personas muertas en combate o la cremación de los cuerpos cuando por su número o por la premura del tiempo no sea posible enterrarlos.
Con lo anterior demostró que el enemigo fue para él antes que cualquier otra cosa hombre. Por ello, lograban despertar en él profundos sentimientos de humildad y compasión.
El 18 de junio de 1822, Bolívar lo ascendió a General de división y lo nombra Intendente del departamento de Quito. El 30 de mayo Sucre recibió el nombramiento de comandante del Ejército Unido, y el 21 de julio fue proclamado Jefe Supremo Militar.
La batalla de Junín, el 6 de agosto de 1824 fue ganada sin emplear fusiles, ni cañones, motivo por el que las tropas independentistas sintieron más grande aún ese triunfo.
“El General Sucre después de la acción de Junín se consagró de nuevo a la mejora y alivio del ejército. Los hospitales fueron provistos por él, y los piquetes que venían de alta al ejército, eran auxiliados por el mismo General: estos cuidados dieron al ejército dos mil hombres, que quizá habrían perecido en la miseria sin el esmero del que consagraba sus desvelos a tan piadoso servicio. Para el General Sucre todo sacrificio por la humanidad y por la patria, parece glorioso. Ninguna atención bondadosa es indigna de su corazón: él es el general del soldado…...….cuando el Libertador lo dejó encargado de conducir la campaña durante el invierno que entraba, el General Sucre desplegó todos los talentos superiores que lo han conducido a obtener la más brillante campaña de cuantas forman la gloria de los hijos del nuevo mundo. La marcha del ejército unido desde la provincia de Cochabamba hasta Huamanga, es una operación insigne, comparable quizá a la más grande que presenta la historia militar.”3
El 7 de octubre de 1824 Bolívar cedió el mando supremo del ejército independentista a Sucre. El 9 de diciembre de ese mismo año en la Pampa de la Quinua en el departamento de Ayacucho4, Sucre se enfrenta junto con 6000 soldados al virrey La serna, quien guía a 9320 hombres, se lleva a cabo el último enfrentamiento armado que sostuvieron los ejércitos españoles y patriotas, dicho enfrentamiento es conocidos como la Batalla de Ayacucho, en la cual salieron victoriosos los independentistas, logrando la independencia del Perú y de América del sur.
“Nuestro ejército era inferior en mitad al enemigo, que poseía infinitas ventajas materiales sobre el nuestro. Nosotros nos veíamos forzados a desfilar sobre riscos, gargantas, ríos, cumbres, abismos, siempre en presencia de un ejército enemigo, y siempre superior. Esta corta, pero terrible campaña, tiene un mérito todavía que no es bien conocido en su ejecución”5
La Batalla de Ayacucho no es solamente una épica acción de armas en cuanto a técnica y pericia militar. Es más: la creación de un gran artista, de un supremo artífice que ha vivido soñando con su obra maestra y finalmente la ve realizada con todos los contornos de la obra perfecta. En Ayacucho nada faltó para dar majestad y carácter a la suprema concepción de Sucre.”6
“La batalla de Ayacucho es la cumbre de la gloria americana, y la obra del General Sucre. La disposición de ella ha sido perfecta, y su ejecución divina. Maniobras hábiles y prontas desbarataron en una hora a los vencedores de catorce años, y a un enemigo perfectamente constituido y hábilmente mandado. Ayacucho es la desesperación de nuestros enemigos……El General Sucre es el padre de Ayacucho: es el redentor de los hijos del Sol: es el que ha roto las cadenas con que envolvió Pizarro el imperio de los Incas. La posteridad representará a Sucre con un pié en el Pichincha y el otro en el Potosí, llevando en sus manos la cuna de Manco-Capac y contemplando las cadenas del Perú, rotas por su espada.7”
Tras esta victoria, Sucre recibió el título de “gran mariscal de Ayacucho.”
En 1825 convoca a una reunión de la Asamblea en donde ésta decide la creación de Bolivia, nueva República (de la cual fue presidente posteriormente) el 6 de Agosto de 1828,el 27 de febrero de 1829 triunfa en la batalla de Turquí, en enero de 1830 el Congreso reunido en Bogotá, lo elige su presidente.
El 4 de Junio de 1830 es asesinado a traición en la montaña de Berruecos.
El General Sucre fue oficial del ejército Venezuela, Colombia y Ecuador y Gran Mariscal de Ayacucho (Perú), así como también presidente de Bolivia.
Sucre: Biografía de un Sacrificio, es una obra muy interesante que pretende dar a conocer la vida del General Sucre, resaltando principalmente su calidad de hombre, sus valores, sus virtudes y sus cualidades (nunca sus debilidades), fue una obra escrita con la intensión de homenajear al héroe de Ayacucho. Tal vez por éste motivo es que en algunos momentos se enaltece tanto al personaje, hasta llegar al punto en el que parece que nos estuvieran hablando de un ser divino, y no de un ser real.
En ciertos fragmentos la obra deja la historia en un segundo plano, para resaltar alguno de los valores del General Sucre, es por ellos que considero que a pesar de ser una obra muy interesante, le falta detalles y precisión en la narración de algunos episodios importantes como son los hechos ocurridos en las batallas de que participó Sucre.
Algo excelente en el libro, por medio de lo cual la lectura permite al lector tomar un respiro, y cambia un poco el lado monótono de la misma, es que al inicio de cada capítulo, se encuentran frases célebres de algunos importantes personajes, (entre los que sobresale Beethoven) que le dan al lector espacio para la reflexión, permitiéndole descansar de su apresurado paseo a través de la historia.
También en ciertos momentos es posible que el lector tenga la impresión de que el autor está dispuesto a empañar la imagen que a través de la historia se ha tenido de personajes más sobresalientes que Sucre y que se vieron vinculados con él, como es el caso de Simón Bolívar, a quien en varias oportunidades califica de inhumano y cruel y lo culpa de grandes atrocidades cometidas en tiempo de guerra como resultado de su lema “luchar hasta la muerte”. Atrocidades que cesaron gracias al “Tratado de Guerra” escrito por Sucre, en el que se garantiza el trato humanitario entre las partes presentes en una guerra.
La lectura de ésta obra permite enriquecer el conocimiento sobre el General Sucre, los personajes que rodearon su vida y las batallas y circunstancias de las que fue participe.
Wolfram Dietrich: Demetrio Boersner, hijo de madre Alemana y de padre Ruso, de origen judío, tenía tan sólo tres años de edad cuando Hitler tomó el poder. Él fue el primero que escribió, bajo el seudónimo de Wolfram Dietrich, una biografía de Bolívar en alemán, llegó a Venezuela en 1939 y conoce en detalle la historia de este país. No sólo porque la haya leído. También porque la ha vivido… Boersner, se doctoró en Ciencias Políticas en la Universidad de Ginebra (1957), ha sido diplomático de larga trayectoria. Fue director general de Política Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores y se desempeñó como embajador ante Rumania, Suecia, Austria, Eslovaquia, Eslovenia y Croacia.
En castellano y bajo el nombre de Wolfram Dietrich, poco se ha escrito de éste personaje, se conoce de él una carta que escribió al secretario de presidencia, Señor Arturo Uslar Pietri, en el año de 1942, por medio de la cual le expresa la admiración que siente hacia su obra literaria “Lanzas Coloradas” , sobre la cual comenta que le permitía formarse un retrato de las luchas y del espíritu en las épocas de las guerras de la Independencia.
Bajo el nombre de Demetrio Boersner, su nombre real, se puede encontrar mayor información sobre éste reconocido profesor, internacionalista e investigador de la UCAB. Pero como lo que interesa en la elaboración de éste ensayo es lo relacionado con su vida como autor de la obra “Biografía de un sacrificio”, no considero necesario tocar éste aspecto de su vida.
La elaboración de la obra “Sucre: Biografía de un Sacrificio”, se inicia gracias a que en la República Venezolana, se quería conmemorar el sesquicentenario de nacimiento de su héroe más puro: El Gran Mariscal Sucre. Y la mejor forma de hacerlo era por medio de obras en las cuales se narraran sus hazañas y su grandeza.
La conmemoración centenaria del nacimiento de Antonio José de Sucre, dio origen a una gran colección de libros que contaban la vida y hazañas de éste gran personaje, fueron publicadas en el siguiente orden:
Por encargo del presidente de la República General Joaquín Crespo según el decreto fecha de 15 de julio de 1894, el Doctor Laureano Villanueva elabora la biografía de sucre titulada: “Vida del Gran Mariscal”.
Por decreto del presidente constitucional General Isaías Medina Angarita se reimprime el 5 de julio de 1944, para la conmemoración de los ciento cincuenta años y prosigue en éste orden:
Sucre: Ciudadano de América. J.A. Cova, Caracas, 1943. Sucre Biografía de un Sacrificio. Wolfram Dietrich, Caracas, 1945. Sucre: Síntesis Biográfica. Juan Oropesa, Caracas, 1945. Sucre: Biografía del Gran Mariscal. Alfonso Rumazo Gonzáles, Madrid; España, 1953. Sucre: Héroe y Mártir de la Libertad Americana. Guillermo A. Sherwell. Versión de Inglés por Samuel Darío Maldonado, Caracas, 1970. Sucre: Soldado y Revolucionario. John P. Hoover y Francisco Rivera. Traductor UDO, Cumaná, 1975. Sucre: Alto Conductor Político Militar. L Larrea Alba, Quito; Ecuador, 1975. Sucre: Soldado y Patriota. Luis Andrade Reimers, Quito; Ecuador, 1992.
Todos éstos títulos se presentaron en edición facsímil dispuesta por el presidente de la República de Venezuela, Doctor Rafael Caldera en ocasión del bicentenario del nacimiento del héroe de Ayacucho y como homenaje a su memoria, en el año 1995, en la ciudad de Caracas.
El libro lo tradujo el mismo Wolfram Dietrich, y contó con la colaboración de J.A. Cova, quien se podría calificar como su “rival” debido a que él también publicó una obra con la biografía de Sucre. Dietrich le dedica su obra a el Doctor Arturo Uslar Pietri.
REFERENCIAS: Referencias Bibliográficas: WOLFRAM DIETRICH, Sucre: Biografía de un Sacrificio, Edición Homenaje Bicentenario Nacimiento de Antonio José Sucre. Caracas 1995. Basadre Grohmann, Jorge (1939), Historia de la República del Perú [1822-1933], Lima: Orbis Ventures SAC. ISBN 9972-205-62-2. Villanueva Sotomayor, Julio R. (2002), El Perú en los tiempos modernos, Lima: Empresa Periodística Nacional SAC y Quebecor World Perú S.A.. VIDA DEL GENERAL SUCRE. Simón Bolívar, Lima ,1825. Referencias Electrónicas: http://www.fpolar.org.ve/aup/broesner.htm http://www.descifrado.com/articulo.php?idart=16681&cat=Descifrado%20En%20la%20Calle http://www.efemeridesvenezolanas.com/html/ayacucho.htm