martes, noviembre 11, 2008

Misterio de Berruecos

El Verdadero Misterio de Berruecos

Por Erika Viviana Ortiz Rodríguez

Berruecos una población cercana a la ciudad de Pasto, zona selvática y de difícil geografía, fue el escenario perfecto para que el cuatro de junio de 1830 se atentara contra la vida del Gran Mariscal de Ayacucho como se le conoce al General Antonio José de Sucre, pero la pregunta que por muchos años un sin numero de autores se han hecho es ¿Quién mato a Sucre?

Un verdadero misterio se tejió alrededor de la muerte del Mariscal José Antonio de Sucre, por su parte la mayoría de autores que se han atrevido a desarrollar el tema con profundidad sostiene que el verdadero actor y autor de este hecho fue el General Obando reconocido especialmente por sus triunfos militares al servicio de los ejércitos de la patria. Pero también se ventilan nombre como el del general Flores y otros contradictores de la brillante carrera política y militar de Sucre.

Al respecto es importante anotar que una de las paginas web visitadas citan un articulo de el diario el Demócrata que dice lo siguiente, “Acabamos de saber con asombro, por cartas que hemos recibido por el correo del Sur, que el general Antonio José de Sucre ha salido de Bogotá... Las Cartas del Sur aseguran también que ya este general marchaba sobre la provincia de Pasto para atacarla; pero el valeroso general José María Obando, amigo y sostenedor firme del Gobierno y de la libertad, corría igualmente al encuentro de aquel caudillo y en auxilio de los invencibles pastusos. Puede que Obando haga con Sucre lo que no hicimos con Bolívar...” Como se ve, el asesinato de Sucre fue como una “Crónica de una muerte anunciada”, ya que el mismo fue planificado y ejecutado con alevosía, ensañamiento, ventaja y premeditación. Si el mariscal se hubiese ido por Buenaventura, allí lo esperaba el general Pedro Murgueitio para darle muerte; si optaba por la vía de Panamá lo acechaba el general Tomás Herrera, y desde Neiva lo vigilaba el general José Hilario López. Con el anterior aparte no es clara la autoría de Obando en el crimen de Sucre pero tampoco se niega su participación.

Por otra parte otro de los autores mencionados sostienen que “Durante mucho tiempo se corrió la noticia que fue el general Juan José Flores, compatriota y compañero de gestas independentistas quien había ideado el crimen, debido a la simpatía del pueblo quiteño al Mariscal y la posibilidad de éste, al radicarse en Quito y de convertirse en el primer presidente del Ecuador – como ocupó las presidencias de Bolivia y Perú”. El asesinato de Sucre ocurrió en el territorio que los dos caudillos dominaban (Flores y Obando) y ayudó a consolidar la ascendente estrella política de ambos. Sin embargo, el magnicidio arrojó también sombras sobre Obando y sobre Flores, por lo que uno y otro se acusaron de la autoría intelectual del mismo. El que llevó la peor parte en esta serie de acusaciones cruzadas fue Obando, pero también fueron muchos los que señalaron a Flores como el autor del asesinato de Sucre. Este asesinato convino en última instancia a ambos, pues contribuyó a debilitar el espíritu de lucha de Bolívar y a derrotar la reacción bolivariana de Rafael Urdaneta.

Los autores que señalan a Obando como autor de este magnicidio escriben al respecto, Eugenio Gutiérrez Cely, Resultados del juicio condenatorio: Se sabe que en 1830 el general Rafael Urdaneta, a la sazón presidente de Colombia, ordenó iniciar proceso contra los implicados, concretamente contra Obando y López, pero al dejar la primera magistratura al año siguiente, las averiguaciones se paralizaron y las pruebas se extraviaron misteriosamente. “En noviembre de 1839 fue capturado en Berruecos el antiguo guerrillero José Eraso. Hasta hacía poco había luchado en las filas del gobierno durante la guerra de los Conventos de Pasto, pero su antigua amistad con José María Obando fue invocada para acusarlo de traición al ejército gobiernista. Según la versión oficial, Eraso creyó que su detención se debía a su participación nueve años atrás en la emboscada a Sucre y, ante la amenaza de ser fusilado, "confesó" la trama del asesinato. Eraso dijo que uno de sus cómplices en el magnicidio había sido el coronel venezolano Apolinar Morillo, y afirmó que habían actuado en cumplimiento de órdenes de José María Obando, por entonces comandante de Pasto. Morillo fue capturado, y ante el ofrecimiento de que se le exoneraría del crimen debido a que su participación había sido "por órdenes superiores", soltó también la lengua y confirmó todo lo dicho por Eraso. Obando se entregó al gobierno luego de solicitar que se le dieran garantías para hacer su defensa en un juicio imparcial. El juicio prosperó en medio de extraordinarias irregularidades procesales, las cuales llevaron a Obando a escaparse y a iniciar una sublevación”. El juicio sobre el asesinato de Sucre nunca concluyó, y aunque Apolinar Morillo fue fusilado el 30 de noviembre de 1842 por este crimen, los partidarios de Obando siempre sostuvieron que la sentencia había sido una patraña más del montaje que el gobierno de entonces realizó contra el general Obando, mostrando asi el respaldo contundente a la inocencia de Obando, pero como demostrar su inocencia ante las pruebas y los hechos que lo hacían ver como el principal responsable de este suceso.

Para citar a otro de los autores que mencionan en sus escritos al general Obando como el responsable de este asesinato encontramos, a Gonzales, Nicolás Augusto, en su obra. El asesinato del Gran Mariscal de Ayacucho que dice en sus líneas lo siguiente, “Existen pruebas suficientes de que fueron los enemigos políticos del Libertador y de todo proyecto que implicara la continuación de la unidad colombiana, quienes planearon y encargaron al general José María Obando, comandante general del Cauca, el asesinato del mariscal Sucre. Se sabe que en Bogotá se reunía un grupo conspirador integrado por Manuel Antonio Arrublas, Ciprián Cuenca, Ángel María Flores, Vicente Azuero, Luis Montoya, Genaro Santamaría y otros. Ellos se proponían disolver la unión colombiana y crear con la Nueva Granada una república independiente. Esto a toda costa, así tuvieran que usar la fuerza o eliminar a las personas necesarias”.

Por ultimo es pertinente mencionar que la historia no solo ha escrito sobre la culpabilidad de Obando en estos hechos, muchos años después de estos fatídicos sucesos muchos personajes de nuestra vida política como don Marco Fidel Suarez apoyaron de manera fehaciente la inocencia de Obando en el hecho, y el autor de este capitulo el escritor Fabio Lozano Torrijos, hace un texto muy interesante pregonando especialmente la inocencia de Obando basado en argumentaciones como: los vicios de los que estaba manchado el juicio contra Obando esto con ocasión de sus enemistades políticas y militares.

Con los apartes citados con anterioridad no cabe ninguna duda de que en realidad y en mi concepto personal fue el general Obando el autor del crimen perpetrado contra la vida del General Sucre y que estos hechos marcaron para siempre no solo su carrera política y militar, sino que debilitaron la confianza de las personas que creían en el, como el propio libertador Simón Bolívar. Pero independientemente de esto este es un tema que siempre a dejado vacios y sin sabores en la historia latinoamericana y que los autores aun se dedican y se dedicaran a tratar de descubrir la verdad sobre los hechos.